Periodismo y diversidad
¡Qué manía tenemos de querer cambiar a la gente! Y a nuestras parejas ya ni te cuento. No tenemos el poder de moldear a nuestra pareja a nuestra imagen y semejanza, como nuestra pareja no tiene ese poder sobre nosotros, aunque a muchos ya le gustaría.
Vivimos en un país donde tenemos mentalidad de cuidar nuestra salud física, vamos al médico, al especialista si es necesario, vamos al gym, etc. Pero no tenemos mentalidad de cuidar nuestra mente, espíritu, emociones...
Pasamos la vida esperando que pase algo y lo que pasa es la vida. No seas tonto porque al final de la vida, de lo único que nos arrepentiremos, es de todo aquello que no llegamos a hacer por esperar ese momento adecuado.
Recuerdo, hace muchos años, mi primera vez. Nunca olvidaré aquel día, al que tanto miedo le tenía, era una necesidad, pero me daba pánico. Necesitaba hacerlo o me volvía loco. No sabía cómo ni con quien, pero mi mente y mi cuerpo me decían: tienes que hacerlo.
Llega la celebración del Día Internacional del Orgullo LGTB, este año teñida de sangre, pero que espero nos motive a seguir alzando la voz, como lo sabemos hacer. Ya todos sabemos qué se celebra, que se reivindica. Este año 2016, todo el año, está centrado en la “visibilidad de la bisexualidad”, y el lema oficial es: “Leyes por la Igualdad Real, ¡Ya! Año de la Visibilidad Bisexual en la Diversidad”.
Comienzo esta semana con unas preguntas que quiero respondas sin pensarlas, lo primero que se te viene a la cabeza y lo anotes: ¿Qué imagen tienes de ti mismo? ¿Cuándo te miras al espejo qué sientes? ¿Te gusta lo que ves? ¿Te atreves a mirarte desnudo?
¿Qué puedes hacer frente a la homofobia, tú concretamente, en tu mundo, en tu hábitat y de forma particular?
No somos conscientes de que muchas convicciones o ideas por las que nos regimos en nuestra vida no nos las hemos creado nosotros, sino que las hemos aprendido a lo largo de nuestra vida. Y no todo lo que se hereda es bueno, porque muchas veces nos autolimita a experimentar, a descubrir, a abrir nuevos horizontes.
Parece que rápidamente se nos olvida lo que hemos vivido o seguimos viviendo que quizás también estuvimos casados, puede que no con una mujer, pero si con unos miedos, con un entorno, con una familia, con un trabajo, que nos dejó metidos en el armario durante mucho tiempo, y algo nos impedía salir, nos impedía vivir.
Cuando llega una ruptura no esperada, cuando llega un final que para uno no tiene sentido, cuando hubo un flechazo y de repente una parte desaparece y nos quedamos en shock, heridos, y nuestra cabeza no para de preguntarse “porqué”, qué ha pasado si todo iba tan bien.
¡Por personas como tu seguiremos trabajando! ¡Seguiremos diciendo sí a la vida, sí a mis derechos! ¡Sí a ser feliz!
La conducta humana viene generada por pensamientos y emociones, y debajo de ellos está algo llamado creencias, que son determinantes en nuestra vida, se instalan en nuestro subconsciente, y pueden ser la causa de nuestra felicidad o infelicidad.
Discreción: dícese de la “reserva o cautela para guardar un secreto o para no contar lo que se sabe y no hay necesidad de que conozcan los demás”.
¡Ay Valentín, Valentín!, y su queridito amigo 'Cupidito', qué malas jugadas que nos hace a veces, parecen que no apuntan muy bien, no dan en la diana, andan algo tuertos... eso del amor no va con nosotros, que no aciertan o acertamos.
Alicia en el país de las maravillas es un cuento muy bonito… Y como buenos mariquitas idealistas (sin querer ofender a nadie), nos vemos por ese camino de baldosas amarillas, dando saltitos con nuestro príncipe azul y nuestra cestita de flores. Aunque muchos dicen que no buscan ni creen en el príncipe azul.
Se acerca la Navidad, tiempo de viajes, reencuentros, amistades, familia, cenas, comidas, y llega la época de hacer y hacernos regalos, de hacer y hacernos felices. Quizás ya estés pensando qué regalar, tirar de visa; o qué te gustaría regalar, pero no hay dinero.
He tenido y tengo conocidos y clientes, afectados por el VIH, que no era tanto la preocupación o miedo a la enfermedad, que por suerte, hoy ya está muy controlada y se puede vivir con ella de forma normal; sino esa parte emocional, que puede afectar de distintas formas.
Cuando expresamos deseos, o incluso afirmaciones, tipo: "una vida normal, un trabajo normal, una relación normal, encontrar a un hombre normal, ser normal..." ¿qué queremos decir concretamente? ¿qué significa para ti la normalidad?
El síntoma de la “mariquita de flor en flor”, aplicado al gay, es aquel que va de relación en relación, que no de polvo en polvo. Es aquel al que ese tilín interior le suena continuamente, que suerte tiene, pensarán muchos; o hace que le suene, que esto ya es otra cosa.
¿Qué va antes el huevo o la gallina? Pues aquí igual, ¿los miedos que no nos dejan disfrutar las oportunidades, o las oportunidades avivan nuestros miedos?
¿Cuántas veces damos por sentadas cosas, en todos los aspectos, desde convivencia, sexo, gustos y colores, que no son así? ¿Cuántas veces estos temas se han convertido en una fuente de problemas, enfados o malos entendidos?
En el inicio de una relación, las mariposas necesitan su tiempo para madurar y volar. Creo que a veces nos excedemos en la velocidad y eso hace que nos estrellemos, quizás si la bajásemos funcione mejor, o el palo sea menor.
No des el poder a otros, ya sean personas, religiones, creencias, para que decidan por ti. Si analizas tus decisiones, tu forma de actuar, sincerándote contigo, igual descubres que de manera inconsciente lo haces, y ahí, puede estar la solución a mucho de lo que te pasa y no te gusta.
Muchas veces, al comenzar una nueva relación damos por sentadas o por definidas muchas cosas que luego no son así, y que llegan a ser puntos de pelea, desencuentros y posibles rupturas.
No voy a valorar por qué las relaciones se rompen o no, y qué se podría hacer antes de llegar a eso. Sino lo que sucede después: ¿qué hacemos después de una ruptura? ¿cómo asimilamos esa pérdida? ¿cómo la superamos? ¿cómo nos recuperamos?
Un año más llegan las celebraciones del Gay Pride en todo el mundo, el próximo 28 de Junio, aunque ya en muchas ciudades se van celebrando en distintas semanas, para no coincidir todas las fiestas el mismo fin de semana.
El otro día comentaba con un cliente que vivimos en una sociedad donde la imagen, en general, es muy importante; yo diría que se le da excesiva importancia a lo visual, que hemos sido creados con más sentidos... Y él me preguntaba si creía que si todos fuéramos ciegos, seríamos más humanos, en el sentido de que a veces nos fijamos en exceso en lo físico.
Al hablar de variedad es en el amplio sentido de la palabra, sin destacar ninguna, ya que a cada uno le pueden gustar unas prácticas u otras, de una forma u otra.
Pregunta típica que supongo alguna vez te han hecho si estás metido en el mundo de las aplicaciones o páginas de contacto; o cuando conoces a alguien en persona y la cita acaba en algo más que un café o una cerveza.
Cuando conocemos a alguien, ya sea en persona o virtualmente, sin darnos cuenta, aplicamos nuestros filtros, criterios y creencias, con las que hacemos nuestro catálogo y clasificación, lo que no significa que sea “la verdad”, ni la definición correcta.
El hecho de salir del armario y vean y veamos que nuestra vida sigue siendo la misma, en cuanto a trabajar, salir, entrar, hacer, etc., ayuda y nos ayuda en la aceptación e integración, como otra persona cualquiera.
Ya hemos comenzado la primavera, y como dice el refrán, la sangre y lo que no es la sangre comienza a revolucionarse. Los campos empiezan a vestirse de verde, las flores a salir, los almendros en flor, y el mundo gay a salir de su hibernación, y las aplicaciones móviles, aplicaciones de ligoteo se ponen a tope.
Esas supuestas imperfecciones, alguien las querrá, porque en muchos casos es el valor diferenciador de las personas, es lo que da autenticidad y originalidad, un estilo propio, lejos de la clonación a la que no sólo nos someten, sino que nos dejamos convencer y someter.
Por suerte o por desgracia, sigue habiendo mucho mito o estereotipos entorno al mundo gay: imagen, buen cuerpo, vestuario de firma y a la última siempre, ingresos económicos, viajes desorbitantes…
¿De qué sirve quejarnos continuamente? Sinceramente, de nada. Bueno sí, ponernos aún peor de lo que podamos estar.
Y de nuevo llega carnaval, una de las fiestas más celebradas en todo el mundo, días para ocultarse detrás de una máscara, bailar y divertirse.
Cuando vamos a comprar algo, siempre o casi siempre, buscamos la etiqueta, para ver su precio, la talla, su composición. La etiqueta es la que da información del producto que estamos mirando, y en base a esa información, podemos decidir comprar o no.
Sentirse “solo” hoy en día es muy triste, una soledad que a veces nos buscamos nosotros mismos o nos viene impuesta, las personas cambiamos, las situaciones cambian, los intereses cambian, los amigos se casan o se emparejan, nuestra economía cambia...
En nuestras relaciones, y sobre todo en las de pareja, muchas veces, hay una palabra que nos cuesta decir o escuchar: "no".
Lo importante es ser conscientes del momento podamos estar viviendo, y que ese tiempo no puede ser permanente, porque nos puede llevar a apagarnos, a tirar la toalla, dejarnos llevar por la desidia, la tristeza.
Se nos acumulan las tareas en estas fechas: visitas, familia, amigos, compras, Nochevieja y Año Nuevo, Reyes Magos; y lo que no puede faltar: balance del año que acaba y los propósitos de Año Nuevo.
El amor es fundamental en la vida de toda persona, porque somos seres sociales, necesitados de dar y recibir. Es ahí donde nos sentimos plenamente realizados como personas de este mundo.
Cuando has tenido relaciones que por una causa u otra se han acabado, y pasado el tiempo de “duelo”, te has lavado de nuevo la cara, te has puesto tus mejores galas para salir, y tus amigos te dicen: “seguro encontrarás a alguien especial, el amor volverá a surgir”; o has conocido a alguien, que de repente te pregunta: “¿qué buscas?”. ¿Qué has contestado?
Cuando decidimos finalmente salir del armario para ser y sentirnos bien con nosotros mismos; sinceramente, ¿qué esperamos encontrar en la otra parte? ¿Al menos respeto, comprensión, tolerancia, apoyo, amor por encima de prejuicios?
Es fundamental, en nuestras relaciones, tener muy en cuenta todo lo que sabemos, y si no conocemos muy bien las posibles formas de transmisión, te invitaría a buscar información, de manera seria y responsable; a no jugar con tu salud o la salud de otros, siendo ecológicos.
El tema de la soledad es algo que podríamos tratar desde varios puntos de vista: vivir, estar, sentirse solo o ser una persona solitaria. Y en el colectivo LGTB me he encontrado con mucha soledad.
Has tomado la decisión, después de muchas dudas, de dar el paso adelante. Pero cada uno tenemos nuestra escala de valores y nuestras preferencias, y, basándonos en estas variables, interpretamos y actuamos. No todos somos iguales, ni pensamos lo mismo frente a una misma situación.
¿Quién no ha quedado por internet o aplicaciones varias, o ha salido de marcha, o a otro sitio, quizás de esos que todos conocen de oídas, y ha conocido a ese alguien "especial"?
Este paso no se da de hoy para mañana, requiere tiempo, trabajo y paciencia, con momentos álgidos, y momentos bajos por los que no hay que dejarse vencer. Piensa que el resultado merece, y mucho, la pena.
¿Qué es para ti seducir? ¿Cómo se te da el arte de seducir? ¿Tienes arte para ello? ¿Te consideras seductor?
Necesitaba “salir de mi gran armario interior”, aceptarme a mí mismo y dejar de vivir una guerra interna constante, por mucho que había intentado darle la vuelta a la tortilla y dejar de ser gay
Vamos a decir: "sí a dar un paso adelante; ser auténticos; ser como somos, y felices y orgullosos de ello; ser nuestra mejor versión; lo que queremos ser; enfocar o (re)orientar nuestra vida hacia donde queremos e ir a por ello”. En definitiva a movernos, descubrir y vivir.